EL PATRÓN ORO

Patrón Oro

El patrón oro es un sistema de tipo de cambio fijos entre la moneda nacional y el oro por el cual era convertible, siempre debía coincidir el valor de las reservas de oro con el del efectivo en circulación, y utilizaba unos mecanismos de ajuste que conseguían un equilibrio en la balanza de pagos de todos los países. Tuvo vigencia desde 1879 hasta un mes después del comienzo de la Primera Guerra Mundial y luego en un periodo breve de restauración del sistema entre 1925 y 1929. Nació con el fracaso del bimetalismo existente desde 1870 y que establecía una paridad fija entre el oro y la plata. Este fracaso viene reflejado por la ley de Gresham por la que la moneda con mayor valor en los mercados monetarios deja de circular, utilizando los países la moneda de menor valor en sus transacciones. En cuanto a los mecanismos para equilibrar la balanza de pagos destaca el ajuste “flujo de especie-precio” de Hume.

Keynes ideó las reglas de juego sobre el patrón oro: relación fija entre la moneda nacional y el oro, las autoridades económicas debían estar dispuestas a cambiar oro por moneda y viceversa, y mantener la convertibilidad del oro, y el Banco central solo creaba dinero cuando compraba oro al público y lo destruía vendiendo oro, además debía tener oro por un valor igual o más que la cantidad de efectivo en circulación.

Cuando se producía déficit en la balanza comercial y reducción del oro en las reservas, se incrementaba el tipo de interés que inmediatamente generaba una entrada neta de capitales, pero también una reducción de la inversión, incremento del paro y reducción de los salarios lo cual derivaría en un proceso de deflación también producido por la reducción de la masa monetaria en circulación al aumentar el tipo de interés. Esta reducción de los precios provocaría un aumento de las exportaciones y una disminución de las importaciones generando superávit en la balanza comercial y una consecuente entrada de oro.

Cuando se producía superávit los países reducían su tipo de interés lo que provocaba una salida neta de capitales, pero también un aume

nto de la inversión, reducción del desempleo y aumento de los salarios provocando inflación, también derivada por el incremento de la masa monetaria en circulación. Ésta subida de los precios provoca una reducción de las exportaciones y un aumento de las importaciones recurriendo en déficit de la balanza comercial y en la salida de oro del país.

Los inconvenientes del patrón oro son: las fuertes oscilaciones en el nivel de precios que no ayudaba en la reducción del desempleo; las medidas que tomaban los países con superávit, políticas de esterilización, con las que impedían el funcionamiento del mecanismo de ajuste y se evitaban el déficit; y por último la crisis de confianza en el sistema debido al agotamiento de las reservas disponibles de oro.